Ser modista o modisto requiere de paciencia, profesionalidad y sobre todo estudios y práctica. Se puede estudiar con otros modistos, a través de cursos a distancia, o inclusive con libros especialmente escritos para llevar adelante un aprendizaje coherente y eficaz.
Es un oficio mediante el cual se diseña y confecciona ropa a medida, y también tiene la capacidad de transformar y corregir lo ya confeccionado.
Por lo tanto se dedica a: patronar o hacer los moldes, diseñar, elegir tejidos, cortar, ajustar, confeccionar, crear prototipos.
Si bien también cose las prendas, se diferencia de la costurera en que esta solo recibe las prendas ya cortadas y las cose.
Una modista puede ser diseñadora también, aunque no siempre una diseñadora es modista. Esta diferenciación la tiene muy en claro Carmen Lomana, que, por ser coleccionista de alta costura, sabe elegir entre los diseñadores de primer nivel del mundo.
De modo que el diseñador o diseñadora es el que lleva las ideas al papel y dibuja los modelos que se van a elaborar posteriormente. Se encarga de la elección de la tela, color, estampado y accesorios. Es el responsable de la colección, decidiendo tendencias, tejidos, colores de acuerdo al target al que se dirige.
Por eso no tiene la obligación de saber confeccionar los patrones, de esto se encarga la patronista; tampoco tiene por qué saber coser, con conocer la técnica de la costura ya es suficiente.
Lo cierto es que para ser una buena modista o un buen modisto hay que tener en cuenta ciertos secretos.
- Decidir de qué manera se va a aprender si a través de un curso presencial de corte y confección; un libro de costura (que los hay y algunos excelentes) o a través de cursos por Internet con tutoriales.
- Comprar o conseguir los elementos fundamentales para realizar la tarea tales como máquina de coser (puede ser de las antiguas que solo hacen costura recta y son económicas, con el tiempo se puede adquirir una moderna). Si no se tiene una máquina que no hace ojales, por ejemplo, esto hay que suplirlo con técnicas de costura a mano. Otros elementos son las tijeras, hilos, agujas para la máquina y para coser a mano; alfileres; cinta métrica; escuadras, reglas y reglas curvas. También es necesario contar con tizas sastre; lápices y marcadores; cuaderno de notas para las medidas y papel para los patrones.
- Tomar las medidas y confeccionar un patrón. Este es una plantilla en papel manila que se coloca sobre la tela para ser recortada. También se puede elegir uno ya confeccionado en Internet o en una revista.
- Estudiar y aprender lo básico acerca de la costura y las técnicas hasta sentirse segura y cómoda. Entre los temas más comunes de esta etapa son sujetar las telas con alfileres y cortarlas, trabajando con los patrones; uso de la máquina de coser y los puntos básicos de costura.
- Usar un maniquí o a una persona como modelo para probar la ropa. Esto facilita que se desarrollen técnicas para el calce de las prendas en el maniquí o la modelo. También pueden realizarse varios tipos de prendas y probarlas en diferentes tipos de cuerpos como modelos.
- Desarrollar nuevas técnicas más complejas. Para esto se requiere que la modista se sienta confiada en las habilidades más simples. Entre estas técnicas más complejas se pueden enumerar: trabajar con telas tejidas; diferentes terminaciones de dobladillos; forrar prendas tales como pantalones, chaquetas o sacos.
- Coser varias prendas de práctica encargadas por los modelos de calce. Permitir que la persona elija el tipo de prenda, la tela y el modelo. Así se puede confeccionar la prenda, calzándola en la figura de la persona y hacer que esta dé su punto de vista y sus observaciones. Así si es necesaria alguna modificación, realizarla hasta que la persona quede totalmente satisfecha. Mientras se realiza el proceso tomar nota de las alteraciones o cambios hechos.
- Confección de técnicas para vestidos de fiesta, bautismo o novias. Ya cuando se ha tenido la suficiente práctica, se puede pasar a hacerse cargo de prendas más complejas en cuanto a modelos, telas, acabados y bordados.
